La bicicleta es una de las mejores formas de disfrutar de la Inglaterra auténtica: no hace un calor asfixiante, no hay colas ni atascos, te ahorras la gasolina, el parking… ¿Te atreves con los 250km de la de la prueba Olímpica de Ciclismo de Ruta? Si te resulta excesivo, existen varias alternativas mucho más relajadas y “deliciosas” para que te vayas entrenando.
El comité encargado de organizar los JJOO de 2012 ya ha publicado el itinerario que recorrerá los 250km de la prueba de ciclismo en ruta. El recorrido no podría ser más seductor: Palacio de Buckingham, Natural History Museum, Richmond Park, Hampton Court Palace, Surrey… Todo depende del tiempo y de las ganas que uno tenga, pero si te parece demasiado, Matt Carroll ha escogido para nosotros 10 de las 60 maravillosas rutas publicadas en su libro Escape Routes.
De Tavistock a Horndon, 22 km, Parque Nacional de Dartmoor, Suroeste de Inglaterra
Puede que pasar la noche en la taquilla de una estación de trenes no parezca el colmo del lujo, a menos que sea en la estación Old Tavistock Railway Station, donde no para ningún tren desde los ‘60 y que ha sido transformada en casitas de lujo para vacaciones.
Los paseos en bicicleta por los alrededores también son de cinco estrellas. Al salir de la ciudad apenas se tarda unos minutos en llegar a The Trout and Tipple, un pub de toda la vida y ambiente rústico, en el que tomarse un tentempié para poder seguir pedaleando hasta Dartmoor.
El trayecto se compone de pequeñas calles laberínticas y arroyos susurrantes hasta llegar a Mary Tavy, donde disfrutar de un merecido descanso y un aperitivo en el Elephant’s Nest.
El camino de vuelta a casa transcurre entre verdes pastos y arbustos que parecen sacados de un poema de Thomas Hardy.
De Tetbury a Sherston, 21 km, Cotswold, Suroeste de Inglaterra
Al salir de Tetbury todo son tranquilos caminos rurales. Los amantes de los pubs rústicos y buena cerveza no tienen más que pedalear hacia la iglesia y bajar la cuesta que lleva al puente Bath Bridge.
Envuelto en el aroma del verano y de la hierba fresca, se tarda unos minutos en llegar a la diminuta aldea de Shipton Moyne, por donde sólo circula algún tractor despistado. Aquí se encuentra el pub Cat and Custard Pot, que sirve la cerveza Wadworth 6X, procedente de la fábrica de cerveza de la vecina Trowbridge. En verano se puede sacar la cerveza a la calle y ver pasar a los aldeanos a caballo.
El siguiente pueblo es Easton Grey, por el que no pasa el tiempo, y la siguiente parada, Sherston, donde la posada Rattlebone Inn sirve salchichas con puré de cebollas dulces desde el siglo XVI.
Tras la comida, es hora de ir a Westonbirt Arboretum, un pueblo que en primavera se tiñe de blanco, rosa y violeta. Después continuamos rumbo al hotel Hare and Hounds, en el que preparan la mejor tarta de limón del mundo. Ánimo, que sólo te quedan 5km de vuelta a Tetbury.
De Aldbury a Frithsden, 24 km, Noroeste de Londres
Esta ruta enamora con sus dos pubs de postal, bosques inolvidables y un camino de sirga junto al canal. Está muy cerca de Londres y tiene un poco de todo, incluso un pequeño viñedo escondido en un valle. Desde la posada The Greyhound Inn, en Aldbury, basta con escalar las calles hasta dejar atrás el pueblo. Cuesta abajo, la bicicleta prácticamente le lleva a uno a The Alford Arms. Nada como una ración de cordero asado con ajo y romero para reponer fuerzas. La ruta de después de comer atraviesa Berkhamsted y sigue por el canal, junto a coloridas embarcaciones, antes de volver a Greyhound. Para entonces, será la hora de otra deliciosa comida.
De Old Wives Lees a Faversham, 25,5 km, Canterbury, Sureste de Inglaterra
A los cinco minutos de haber dejado atrás la exquisita cabaña Pond Cottage se llega a un bosque digno de un cuento de Lewis Carroll. El suelo es una alfombra de campanillas azules, los pájaros cantan, las ardillas corretean de árbol en árbol. Es tan bucólico que parece que la cosa no se puede poner mejor. Pues lo hace, ¡porque también hay un pub! Sirven cervezas locales difíciles de olvidar y un vino que da ganas de relamer la copa. El pub Rose & Crown está rodeado de senderos, y los dueños, Vanessa y Tim, son extremadamente amables.
De vuelta al sillín, los campos de flores amarillas de Sheldwich nos acompañan hasta llegar a Painters Forstall, un lugar en el que parar a descansar y visitar la sidrería familiar Pawley Farm.
Es hora de seguir rumbo a Faversham, el pueblo donde el buen comer se eleva a la categoría de arte. El mercado medieval huele a té, a pastas, a carne asada y otras delicias de los pubs y restaurantes cercanos. A la jornada sólo le quedan unos pocos kilómetros de vuelta a Pond Cottage ¿A alguien le apetece un baño de espuma?
Del priorato de Butley a Orford, 30 km, Suffolk, Sureste de Inglaterra
Cuando uno levanta la vista hacia las ventanas góticas del priorato de Butley, lo único que echa en falta es una Rapunzel de East Anglia con sus trenzas largas al viento. La piedra ornamentada con cotas de armas, arcos y gárgolas, es el comienzo de un fin de semana de cuento de hadas.
El viaje a Orford comienza en una carretera fácil y tranquila, rodeada de pinos. Por entre las ramas se filtran suaves rayos de sol y pronto los pinos ceden su lugar al rojo de las amapolas. Este increíble paisaje es Mill Lane.
En un abrir y cerrar de ojos se llega a Orford. Aquí se encuentran varios de mis restaurantes favoritos, como el Butley Orford Oysterage, especializado en marisco fresco procedente del estuario que está a escasos metros de la cocina.
Es el momento de atravesar los campos dorados de cereales de Iken y el vergel de Tunstall Forest. Si todo va según lo previsto, estaremos de vuelta en el priorato al atardecer. Los ingleses dicen que es una hora mágica, y aquí, hasta los más escépticos sentirán la magia.
En cualquier caso, son muchas las opciones disponibles para conocer Inglaterra sobre pedales. Además, las empresas de alquiler de bicicletas y otros servicios relacionados con esta manera de viajar también están disponibles prácticamente en cada localidad. Tesoros culturales, gastronomía, ocio, naturaleza…